Avances en la seguridad de la aplicación de inyecciones

La propagación de infecciones y enfermedades es oportunista por naturaleza, y quienes entran en contacto con estos peligros de forma rutinaria deben protegerse empleando prácticas y herramientas sólidas diseñadas para reducir dichos riesgos.

Este fue el mensaje transmitido a una audiencia de casi 120 representantes de grupos de hospitales privados, departamentos de salud del sector público, servicios de patología, profesores de ciencias de la salud en las universidades, organismos de investigación y grupos profesionales que participaron en la Cuarta Cumbre de Seguridad de los Profesionales Sanitarios, celebrada en Johannesburgo, Sudáfrica. Facilitado por un equipo regional de BD dirigido por el director de país de BD, Ian Wakefield, los profesionales de atención médica que asistieron a la cumbre obtuvieron información sobre temas como las Opciones para mejorar la seguridad de las inyecciones, las Directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Fomento de la cultura de la seguridad.

Seguridad y vigilancia local: una perspectiva de economía de la salud e investigación de resultados fue presentada por el Dr. Pieter de Jager, médico del Departamento de Anestesia de la Universidad de Wits y miembro del Instituto Nacional de Salud Laboral (NIOH) de Sudáfrica. “Según cálculos moderados, estimamos que al menos 20 médicos y enfermeras del sector de la salud pública contraen el VIH cada año a través de lesiones por pinchazos. De acuerdo con nuestro estudio, podríamos reducir esta cifra a más de la mitad, mediante la capacitación y el suministro de dispositivos de seguridad”.

Los profesionales sanitarios sudafricanos se encuentran en una categoría de alto riesgo de sufrir lesiones por pinchazos e infecciones por patógenos transmitidos por la sangre. En la actualidad, no existe un enfoque estandarizado para proteger a los profesionales sanitarios del país de las lesiones por pinchazos. Sin embargo, la magnitud de las lesiones por pinchazo en Sudáfrica es tal que ha sido necesario implementar mejores estrategias para mejorar la seguridad de los profesionales sanitarios.

El Sr. Wakefield declaró: “La OMS ha reconocido el peligro que suponen las lesiones por objetos punzocortantes y ha establecido directrices de fácil aplicación sobre la seguridad de las inyecciones, incluida la gestión del riesgo laboral”. Y añadió: “Basta con un segundo. La cuestión es entonces si en Sudáfrica estamos haciendo lo suficiente para garantizar la seguridad y la protección de los profesionales sanitarios”.

En Estados Unidos, BD ha desempeñado un papel fundamental en la promoción de la legislación para garantizar la seguridad de todos los que trabajan con instrumentos afilados. La defensa por parte de BD de directrices nacionales similares en muchas partes del mundo, para apoyar el uso de dispositivos de seguridad junto con la educación, la formación, la vigilancia y el desarrollo de capacidades, coincide con su propósito de BD de impulsar el mundo de la salud.