Consistencia en horas y zonas de inyección

Con el fin de predecir con fiabilidad el efecto de una dosis de insulina, es importante inyectarse siempre

A LA MISMA HORA, EN LA MISMA ZONA

Por ejemplo, si a un paciente se le ha recomendado inyectarse en el abdomen la insulina de la mañana, no debe cambiar al muslo u otra zona injustificadamente.

Si por alguna razón específica (dolor, ejercicio...) se ha cambiado el método a seguir, el paciente siempre debe anotar en su diario el cambio de zona de inyección en ese determinado momento del día, así como cualquier fluctuación de la glucemia que se produjera después del cambio.

En la práctica, cuando se inyecta un análogo de acción rápida y/o prolongada, es recomendable mantener el método de a la misma hora, en la misma zona. Esto ayudará a asegurar la organización de un programa de rotación efectivo.

Si un paciente ha sufrido episodios de hipoglucemias repetidamente a una misma hora del día, deberá reconsiderar la zona y técnica de inyección seleccionadas para esa inyección.